La pandemia trajo consigo cambios en todas las industrias a nivel global, lo que se tradujo en que las empresas debieron adaptarse rápidamente a esta “nueva normalidad”, acelerando e impulsando múltiples transformaciones, desafiando todas las formas conocidas de trabajar y relacionarse en este proceso de digitalización.
Para las startups o pymes tampoco fue la excepción, ya que debieron restructurar tanto su organización interna, como a manera en la que venden sus productos o prestan un servicio de digitalización.
“La transformación digital es un camino y no un destino, el cual requiere profundos cambios en la estructura de las compañías. Esto se traduce en un continuo esfuerzo y en una hoja de ruta que debe ser recorrida desde el aspecto interno de una organización, y que conlleva el desarrollo y un trabajo cultural de cada una de las áreas y personas que participan en una empresa”, asegura Maximiliano Fábrega, director regional AMS & Digital Experience SONDA.
La digitalización ha tomado un rol fundamental para las empresas, ya que gracias a ella las compañías han podido adaptarse más rápido y de manera más eficiente a las demandas del entorno, asegurando la competitividad dentro de su industria y dándole énfasis a anteponerse a escenarios futuros.
Para comenzar el camino hacia la transformación digital, existe una hoja de ruta concreta que va desde lo interno a lo externo y que según Fábrega “aquellas organizaciones que implementen esta modalidad serán aquellas que tendrán asegurado su posicionamiento en la industria en el largo plazo”.
Siete pasos para activar el proceso de digitalización en las pymes:
- Comenzar de adentro hacia afuera: Los líderes de la organización deben entender cuáles son las fortalezas, debilidades y oportunidades de la empresa y, sobre todo, identificar de mejor manera cuáles son las tecnologías necesarias para el contexto de su industria. Esto les permitirá definir los objetivos organizacionales y generará un camino más despejado para la toma de decisiones entorno a la madurez digital.
- Adaptar la cultura organizacional: Desde los tomadores de decisiones hasta los ejecutores, es necesario informar, pero sobre todo educar a los colaboradores de la organización para que entiendan que la inclusión de nuevas tecnologías no va a hacer que su trabajo sea subestimado o sustituido, sino que va a facilitar sus labores dentro de la organización.
Diversas encuestas han demostrado que las empresas que implementan estrategias claras para el cambio, y que apoyan activamente a sus colaboradores para que las acepten, tienen mucho más éxito en lograr mejores resultados en sus proyectos transformacionales. Siempre se debe mantener el aprendizaje digital.
- Entender las demandas del entorno: Cada industria, negocio o pequeñas empresas viven condiciones distintas. No es lo mismo manejar un restaurante que una plataforma de e-commerce, o las consecuencias que tuvo cada organización al adaptarse a “la nueva normalidad”. Entonces, al entender qué está pasando afuera, permite definir un proceso de transformación digital consistente.
- Siempre tomar en cuenta la ciberseguridad: Los procesos de transformación digital van de la mano de la seguridad, puede que muchas organizaciones grandes tomen en cuenta el punto, pero es más común que las pymes no estén muy conscientes de la importancia o ahorren en este ítem. Es un tema que debe ser parte del roadmap de la transformación y tomarse con importancia.
- Definir equipos de transformación digital: La pregunta siempre va a ser ¿se necesita mucho dinero para iniciar el proceso de digitalización o transformación? La respuesta es que no necesariamente, ya que depende de las necesidades de cada organización. Sin embargo, debe existir un equipo que asuma la responsabilidad de llevar adelante este proceso de transformación y que, a su vez, involucre a todos los miembros de la organización. La definición de equipos, células o pods que puedan tener a cargo la ejecución de una parte del plan de transformación, es clave en el proceso.
- Seguir una hoja de ruta: La transformación digital amerita de una planificación estratégica y es importante que ésta se encuentre definida a la medida de todas las variantes que se diagnosticaron en los pasos previos. Contar con la asesoría de un experto en el proceso puede ser la clave para el éxito de la transformación de una organización.
- Revisión constante: Por ultimo, se debe tener en cuenta que la transformación digital o el proceso de digitalización es un camino y no un destino. Ante este contexto, es importante mantenerse a la vanguardia de nuevas y tecnologías que se adapten a cada industria y, sobre todo, entender las demandas del entorno y estar en una constante revisión de los objetivos internos.