La evolución digital ha cambiado las tendencias de los lectores, hoy no solo buscan acceder a sus textos de interés a través de un libro físico, sino también ser atendidos con exclusividad. Por ende, la reinvención del mercado editorial ha sido clave para atender las necesidades sin asumir costos extras.
Este cambio en el mercado editorial responde a las nuevas exigencias y mirada del consumidor. Los lectores buscan ser valorados y que se les ofrezca contenido personalizado para reconocer su lealtad. Para ello, los modelos de producción digital facilitan las tiradas cortas y ediciones económicas, generando un nuevo flujo de ingresos gracias al diseño de contenido exclusivo para microcomunidades.
“Cuando un servicio de impresión no es capaz de gestionar el creciente volumen de demanda y mayor calidad, se pueden generar costes de externalización innecesarios, provocando pérdidas tanto monetarias como de tiempo. Por ello es clave analizar a través de diversas herramientas tecnológicas, cómo varía la tendencia del consumidor, de esta manera se produce/imprime solo cuando es necesario”, explica Mauricio Villarroel, PPS Business Developer de Canon.
Mercado editorial y nuevas tecnologías
La impresión digital permite mejorar la gestión del ciclo de vida de los libros al transferir un porcentaje de toda la producción offset a impresión bajo demanda. Esto es clave, ya que en la impresión offset un 30% de los libros pueden acabar desperdiciados y las tiradas cortas no ser del todo eficientes.
“Al implementar la impresión bajo demanda, los negocios tendrán mejores estrategias de previsión, óptimo almacenamiento de inventario y una reducción en los plazos de entrega ya que se les dará prioridad a los textos más solicitados, sin perder el tiempo con aquellos que muchas veces no se venden. Para ellos, equipos como la serie imagePRESS son ideales ya que cumplen con los amplios requisitos de servicios de impresión tanto comerciales como internos”, asegura Villarroel.
Una tecnología eficiente es fundamental para reducir los costes, errores y retrasos. En ese sentido, las tiradas cortas mantienen un control de los resultados impresos a través del seguimiento de trabajos automatizados, mejorando la visibilidad y seguridad de los procesos.
Alcanzar el éxito es posible cuando se realiza un mapeo de consumo en este mercado editorial cambiante.
“Usar los datos es una gran oportunidad para ofrecer contenido inteligente y exclusivo, estos facilitan poner a la venta productos dirigidos que profundicen en las experiencias de los clientes, al mismo tiempo que el negocio eficientiza sus procesos y no produce de más. Cliente feliz, editorial feliz”, señala Villarroel.