Mucho hemos escuchado de la falta de profesionales calificados en el sector tecnológico. De hecho, la Asociación Chilena de Empresas de Tecnologías de Información (ACTI) calcula que al año, el país necesita más de 5.000 talentos TI. Esto, porque la industria tecnológica está en constante crecimiento, en específico, un 9,4% en Latinoamérica para fines de este 2022, según las proyecciones de IDC.
Lo curioso es que durante este año, vimos como una masiva ola de despidos recorrió el sector tecnológico, dejando a casi 90 mil personas -provenientes de más de 670 startups alrededor del mundo- sin empleo, de acuerdo a los datos de layoffs.fyi, plataforma que hace un seguimiento en vivo de todos los despidos de startups tecnológicas desde el inicio de la pandemia. Y justamente en esto último cae la responsabilidad en la contratación de talentos TI.
Pandemia y Talentos TI
El Covid-19, además de la invasión de Rusia a Ucrania, ha desatado una crisis económica a nivel mundial, que está poniendo un freno a las inversiones y la posibilidad de seguir creciendo. El Fondo Monetario Internacional lleva meses hablando de este tema y en su último Informe de Perspectivas de la Economía Mundial de octubre de este año, habló de “una desaceleración generalizada y más acentuada de lo previsto, con la inflación más alta registrada en varios decenios” en la actividad económica mundial.
De acuerdo a las proyecciones, el crecimiento mundial se desacelerará de 6,0% en 2021 a 3,2% en 2022 y 2,7% en 2023. Como ya se mencionó, este no es un buen augurio para los inversionistas, dado el contexto de incertidumbre económica.
Al disminuir esta inversión, el enfoque de las empresas cambió y ahora se está tomando una posición más conservadora. Esto no significa que dejen de contratar personal, sino más bien, que quienes lleguen, serán perfiles específicos con una mirada más estratégica para la escalabilidad de la empresa.
El llamado es a actuar con sensatez. No solo a las compañías, sino que también de parte de las instituciones educativas que están impartiendo carreras ya obsoletas, o con poca proyección laboral. Es necesario que las capacitaciones y formación profesional vayan acorde a lo que está exigiendo el mercado. No se puede tomar el riesgo de invertir en más y mejor tecnología sin los profesionales responsables de manejarla, porque se siguen necesitando profesionales capacitados en tech, la tecnología es el nuevo petróleo y no se va a extinguir como el combustible. En ese sentido, se debe seguir apostando por el desarrollo y potenciando todo el talento humano requerido.
Aunque las noticias en los últimos días suenan alarmantes, la apuesta por desarrollar los Talentos TI debe ser una premisa que permanezca en el tiempo, y que no dependa de peaks de demanda, sino de una visión estratégica para hacer realidad las proezas que vienen para el sector.