Si hablamos de movimientos sísmicos, temblores, terremotos, los chilenos podemos hablar con autoridad, a ratos se nos olvida que somos el país más sísmico del mundo pero la naturaleza se encarga a menudo de recordárnoslo, tal como ha ocurrido los últimos días por lo que es necesario prevenir sismos.
Ante esta realidad país el Centro Innovo de la Universidad de Santiago brindó el apoyo a dos grupos de emprendedores que cuentan con innovadoras soluciones que prometen ser un aporte para afrontar este escenario que constantemente nos acompaña
Ideas chilenas para prevenir sismos
Se trata de Xancura, sistema que detecta con segundos de anticipación un movimiento telúrico, y Pevi, marco de puertas y ventanas antisísmicas.
Orientado a empresas e instituciones que puedan mitigar los efectos de un sismo con una alerta automática, Xancura ha desarrollado un sistema confiable, integrado por sensores, elementos de comunicaciones y piezas de software que permiten, en su conjunto, discriminar en muy pocos milisegundos si se trata de un sismo real y alertar, con algunos segundos o incluso minutos de anticipación, a zonas ubicada a más de 30 Km. del epicentro.
Este servicio está orientado, principalmente, a todas las industrias e instituciones que puedan mitigar los efectos de un sismo al recibir una alerta preventiva automática. El tipo de acciones que la institución puede adoptar al recibir esta alerta se dividen en dos tipos: aquellas para proteger la integridad física de las personas, y aquellas para proteger activos, específicamente en aquellos procesos productivos en los que una máquina detenida, o a menor velocidad, se vea menos afectada por el sismo.
Pevi, en tanto, desarrolló el denominado Marco Flotante Antisísmico, que está compuesto de un sistema tecnológico de disipación sísmica, que evita el encierro y mantiene intacto el funcionamiento de la puerta durante y después de un terremoto o ante cualquier tipo de movimiento que ponga en riesgo el descuadre de los marcos y genere bloqueos. El sistema no genera modificaciones funcionales ni estéticas. Y la tecnología es aplicable a puertas de departamentos, casas, empresas, escuelas y lugares públicos.
Dos emprendimientos capaces aprovechar los embates de la naturaleza para minimizar daños y riesgos y que pueden ser el inicio de una serie de nuevos proyectos que especialicen a nuestro país en tecnología antisísmica.
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