
En el marco de la celebración del Día de Sobregiro de la Tierra 2019, el pasado 29 de julio, Schneider Electric, anunció su compromiso con la promoción de la compatibilidad con un planeta reduciendo su huella ecológica a nivel empresarial.
De acuerdo a un informe publicado por la multinacional pasado 22 de julio, se delinea en detalle el enfoque necesario en miras a la compatibilidad con nuestro planeta y la prosperidad de la humanidad, así como las métricas que lo respaldan. Dicho enfoque fue desarrollado en asociación con Global Footprint Network, organización internacional de sostenibilidad pionera en la medición de la huella ecológica.
El Día del Sobregiro de la Tierra marca la fecha en que la demanda de alimentos, fibra, madera y absorción de carbono (la huella ecológica global) supera la cantidad de recursos biológicos que los ecosistemas de la Tierra pueden regenerar a lo largo de un año (biocapacidad global).
Este año, el Día de Sobregiro de la Tierra fue el 29 de julio, la fecha más temprana en la historia de la humanidad según Global Footprint Network. Este hecho pone de relieve que la humanidad está usando los recursos biológicos 1,75 veces más rápido de lo que la naturaleza tarda en regenerarlos. Así, empeora el déficit ecológico durante cuatro meses del año a causa del agotamiento del capital natural de la Tierra. Se dice que la humanidad «usa» 1,75 planetas. Las emisiones de carbono representan el 60% de la huella ecológica.
«El modelo de negocios de una empresa líder como Schneider Electric, cuya estrategia corporativa se centra en impulsar la eficiencia energética y de los recursos en general, necesariamente promueve la prosperidad, ya que gira en torno de ayudar a la humanidad a sortear el sobregiro ecológico», dijo el fundador de Global Footprint Network, Mathis Wackernagel.
Hay que mencionar que desde que el mundo comenzó a registrar sobregiros ecológicos a principios de la década de 1970, el Día de Sobregiro de la Tierra se fue adelantado sistemáticamente. Hace treinta años, era en octubre y hace veinte, a fines de septiembre. Tras un enlentecimiento reciente, en los últimos dos años la fecha volvió a adelantarse a causa de un nuevo aumento en las emisiones de carbono.