El sobreendeudamiento es uno de los problemas económicos más recurrentes y complejos que pueden enfrentar los emprendedores y Pymes.
Las cifras así lo demuestran: según información de la Comisión para el Mercado Financiero (CMF), en mayo y en préstamos comerciales, la morosidad de 90 días o más se incrementó en un 2,44% de la cartera, una de las más elevadas.
Una tendencia que en los negocios se ve incrementada por la falta de una adecuada gestión financiera, que impacta en las decisiones de inversión, la ausencia de un plan de negocios sólido y una deficiente gestión empresarial que resguarde debidamente el control de los gastos, entre otros factores.
“En general las Pymes suelen ser más vulnerables a las fluctuaciones económicas, por ejemplo, una disminución en la demanda o un aumento en los costos operativos puede generar dificultades para cumplir con los pagos de la deuda. Por otro lado, tienen un acceso limitado al financiamiento a largo plazo y a tasas de interés competitivas, lo que las obliga a recurrir a fuentes más costosas y a corto plazo”, sostuvo Gabriel Vergara, CEO de Smart CFO, compañía especializada en administración financiera de pymes.
Cómo combatir el sobreendeudamiento en el mundo pymes
Por este motivo, el especialista entrega una serie de medidas para combatir el sobreendeudamiento de este tipo de empresas, de cara a fin de año:
Planificación financiera rigurosa:
- Presupuesto detallado: Elaborar un presupuesto realista que incluya todos los ingresos y gastos proyectados.
- Análisis de flujo de caja: Monitorear constantemente el flujo de caja para identificar posibles desequilibrios.
- Establecer metas financieras claras: Definir objetivos a corto y largo plazo para guiar las decisiones.
Gestión eficiente del crédito:
- Evaluación exhaustiva: Analizar cuidadosamente cada solicitud de crédito y evaluar su impacto en la capacidad de pago.
- Diversificación de fuentes de financiamiento: No depender exclusivamente de una sola fuente de crédito.
- Negociación de condiciones: Buscar las mejores tasas de interés, plazos de pago, pero sobre todo, una cuota que podamos pagar.
Control de gastos:
- Optimización de costos: Identificar y reducir los gastos innecesarios.
- Compra inteligente: Adquirir bienes y servicios sólo cuando sean necesarios y al mejor precio.
- Negociación con proveedores: Buscar descuentos y mejores condiciones y plazos de pago.
Seguimiento de deudores:
- Cobranza eficiente: Establecer procedimientos claros y oportunos para la cobranza de cuentas por cobrar.
“A esto le sumamos, que a pesar de la ley de pagos a 30 días, las empresas se enfrentan constantemente a pagos atrasados y clientes morosos. Donde las empresas de menor tamaño son las más perjudicadas, ya que cuentan con un menor acceso a financiamiento y herramientas de cobro que les permitan presionar el pago” plantea Belén Sanguinetti, Cofounder de CobranzaOnline.com, plataforma que apoya a las empresas en la cobranza de sus facturas vencidas.
Incentivos para el pago puntual: Ofrecer metodos de pago que permitan cuotas o bonificaciones a los clientes que paguen a tiempo.